Cómo debe ser la enseñanza del futuro según la Agenda 2030
No podemos negar que estamos avanzando a pasos agigantados a muchos niveles pero debemos preguntarnos: ¿vale todo en pro de la evolución? ¿Dónde ponemos los límites?
Es evidente que no debemos ni queremos renunciar a los beneficios de las nuevas tecnologías, pero es necesario que aprendamos a seguir avanzando de forma más sostenible y responsable en todos los sentidos. Por eso, en septiembre de 2015, más de 150 jefes de Estado y de Gobierno se reunieron en la Cumbre del Desarrollo Sostenible y aprobaron la Agenda 2030.
¿Qué es la Agenda 2030?
Se trata de un documento con 17 objetivos de aplicación universal para lograr un mundo sostenible en el año 2030.
Algunos de los objetivos de la Agenda 2030 son combatir la desigualdad y el cambio climático, erradicar la pobreza extrema y el hambre, asegurar la igualdad de género y los derechos humanos de las mujeres y garantizar el acceso universal a servicios de salud y educación de calidad. Este plan compromete a todos los países, sin importar su nivel de desarrollo. Así pues, España debe sumarse también a este esfuerzo colectivo para lograr un desarrollo responsable, igualitario y sostenible.
Objetivo 4: Educación de calidad
De acuerdo con el Gobierno de España, este punto busca “garantizar una educación inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos”. Para lograr este objetivo, se plantean 10 metas principales:
- Asegurar que todas las niñas y todos los niños terminen la enseñanza primaria y secundaria, que debe ser gratuita, equitativa y de calidad y garantizar resultados de aprendizaje pertinentes y efectivos.
- Asegurar el acceso a servicios de atención y desarrollo en la primera infancia y educación preescolar de calidad, a fin de que estén preparados para la enseñanza primaria.
- Asegurar el acceso igualitario de todas las personas a una formación técnica, profesional y superior de calidad, incluida la enseñanza universitaria.
- Aumentar el número de jóvenes y adultos con las competencias necesarias, en particular técnicas y profesionales, para acceder al empleo y el emprendimiento.
- Eliminar las disparidades de género en la educación y asegurar el acceso igualitario a todos los niveles de la enseñanza y la formación profesional para las personas vulnerables.
- Asegurar que todos los jóvenes y una proporción considerable de los adultos estén alfabetizados y tengan nociones elementales de aritmética.
- Asegurar que todos los alumnos adquieran los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para promover el desarrollo sostenible, los derechos humanos, la igualdad de género, la promoción de una cultura de paz y no violencia, la ciudadanía mundial y la valoración de la diversidad cultural y la contribución de la cultura al desarrollo sostenible.
- Construir y adecuar instalaciones educativas para cubrir las necesidades de los niños y las personas con discapacidad, las diferencias de género y que ofrezcan entornos de aprendizaje seguros, no violentos, inclusivos y eficaces para todos.
- Aumentar el número de becas disponibles para los países en desarrollo, los pequeños Estados insulares en desarrollo y los países africanos, a fin de que sus estudiantes puedan matricularse en programas de enseñanza superior de países desarrollados y otros países en desarrollo.
- Aumentar considerablemente la oferta de docentes cualificados, incluso mediante la cooperación internacional para la formación de docentes en los países en desarrollo, especialmente los países menos adelantados y los pequeños Estados insulares en desarrollo.
¿Cómo pueden ayudar las nuevas tecnologías a conseguir estas metas?
Debemos tener en cuenta que entre el resto de objetivos de la agenda están los de erradicar la pobreza, garantizar el acceso a servicios básicos y nuevas tecnologías y ofrecer acceso universal y asequible a Internet.
Teniendo esto en cuenta, podemos ver cómo las herramientas digitales y las nuevas tecnologías pueden ayudar a conseguir las metas propuestas para el año 2030 en educación.
En primer lugar, las herramientas digitales como por ejemplo las aplicaciones para videoconferencias, pueden ayudar a los docentes a dar instrucciones u ofrecer ayuda personalizada a los alumnos. Otro ejemplo sería un software educativo diseñado para estudiantes que les puede facilitar un mejor desarrollo de sus habilidades. De hecho, en esta misma línea, cada vez son más los expertos que afirman que las nuevas tecnologías pueden ayudar a reducir la brecha de aprendizaje.
Por otro lado, si hablamos de conseguir una educación inclusiva y eficaz, hablamos inevitablemente de la enseñanza híbrida. Una modalidad mucho más flexible, que da respuesta a las necesidades de todos los actores implicados en el proceso educativo. Dentro de esta metodología entran el blended learning, la formación online, las aulas invertidas, las clases presenciales, etc. ¿Esto que quiere decir? Pues, por ejemplo, que un estudiante podrá elegir entre asistir a una clase de forma presencial o seguirla virtualmente.
Evidentemente, para poder implantar esta metodología de enseñanza es necesario utilizar herramientas digitales como elementos de soporte. Classlife es una gran solución: te permite integrar las aplicaciones más utilizadas en el sector, ya que se trata de una plataforma todo-en-uno y el objetivo es que tengas todo lo que necesitas en un mismo espacio. La plataforma incluye también un campus virtual que mejora la participación de los estudiantes y permite que cualquier centro ofrezca un modelo de educación híbrida a sus alumnos.
En definitiva, el objetivo de conseguir una educación de calidad como marca la agenda 2030 es también la meta de Classlife y nuestra plataforma está diseñada para que todos los centros educativos puedan llegar a ella.