Desde hace varias semanas ChatGPT está en boca de todos y uno de los sectores donde más se habla de esta herramienta es el educativo. Se trata de un chatbot o, lo que es lo mismo, un programa que permite simular conversaciones con una inteligencia artificial (IA) y genera respuestas que pueden convertirse en textos, artículos, trabajos, etc.

Las problemáticas que puede generar el mal uso de esta IA por parte de los alumnos no son pocas y surgen muchas preguntas: ¿Será posible saber qué estudiantes utilizan ChatGPT para redactar sus trabajos? ¿Lo usarán en exceso los alumnos y empeorará su nivel académico? ¿Es veraz la información que genera esta herramienta o puede beber de fuentes no fiables e incluso llegar compartir informaciones falsas?

Hemos querido ir a la fuente y preguntarle a ChatGPT sobre esto. Su respuesta, generada por IA, ha sido la siguiente:

Hay varios riesgos potenciales que podrían presentarse al utilizar un chatbot de inteligencia artificial en el ámbito educativo. Algunos de ellos son:

    1. Reemplazo del docente: Si el chatbot es capaz de brindar respuestas precisas y detalladas a las preguntas de los estudiantes, podría ser visto como un reemplazo para el docente, lo cual podría tener un impacto negativo en la interacción social entre los estudiantes y el docente, y en la motivación de los estudiantes.
    2. Limitaciones en el aprendizaje: El uso excesivo de un chatbot podría limitar el aprendizaje de los estudiantes ya que el aprendizaje a través de la interacción social es crucial para el desarrollo cognitivo.
    3. Problemas de privacidad: La recolección y el almacenamiento de datos personales de los estudiantes podría representar un riesgo para la privacidad. Es necesario garantizar la seguridad de los datos personales de los estudiantes.
    4. Falta de humanidad: Un chatbot no tiene empatía o comprensión emocional, lo que significa que no podría responder de manera adecuada a problemas complejos o situaciones de emergencia.

Sin embargo, es importante destacar que estos riesgos son principalmente teóricos, y en general, un chatbot puede ser una herramienta valiosa si se utiliza de manera adecuada en el contexto educativo. Puede ayudar a los estudiantes a obtener respuestas rápidas a sus preguntas, mejorar la eficiencia y la efectividad de la enseñanza, y brindar apoyo adicional fuera del horario de clases.

Cuando le pedimos cómo puede un profesor detectar que un alumno ha utilizado un chatbot para un trabajo, ChatGPT dice:

Existen varias formas en las que un profesor podría detectar que un alumno ha utilizado un chatbot como ChatGPT para sus deberes:

    1. Detección de plagio: El uso de un programa de detección de plagio puede identificar el contenido generado automáticamente. Aunque el chatbot genera contenido original, pueden detectar patrones en el lenguaje que indican que ha sido generado automáticamente.
    2. Diferencias en el estilo de escritura: Un profesor que conozca bien el estilo de escritura de su alumno, puede notar diferencias significativas en el trabajo presentado. El contenido generado por un chatbot puede tener un estilo muy diferente al de una persona, especialmente cuando el mismo genera contenido en un idioma diferente al de origen.
    3. Falta de comprensión: Si el trabajo presentado parece no mostrar una comprensión profunda del tema, el profesor podría sospechar que ha sido generado por un chatbot.
    4. Preguntas directas: El profesor puede hacer preguntas específicas sobre el contenido del trabajo, y si el alumno no es capaz de responder de manera satisfactoria, podría indicar que el trabajo fue generado por un chatbot.

Es importante también señalar que es difícil asegurar que un alumno ha utilizado un chatbot para su trabajo, y el profesor debe tener cuidado al alegar plagio o el uso de herramientas automatizadas. Una posible solución sería permitir y alentar el uso de estas herramientas en tareas o proyectos específicos, donde el objetivo sea no solo el contenido aprendido sino también el proceso de aprendizaje y la creatividad.

Dejando a un lado las respuestas de esta IA, la realidad es que, por ejemplo, en Nueva York ya se ha restringido el acceso a ChatGPT en los colegios públicos, impidiendo que alumnos y profesores puedan utilizarlo. Pero, ¿por qué se están tomando medidas tan “drásticas”?

Se trata de una herramienta que puede ser útil en algunos casos o sectores y que es fascinante se mire como se mire. Sin embargo, siendo algo tan reciente, es muy fácil ver los riesgos en el ámbito educativo: no ayuda a desarrollar habilidades de pensamiento crítico y resolución de problemas, puede que reproduzca información falsa o incorrecta, los alumnos pueden perder habilidades de redacción y comprensión, pueden también compartir datos o información privada sin darse cuenta, etc.

En cambio, es más difícil poder ver, en tan poco tiempo, cuáles son los beneficios de ChatGPT en educación; pero los hay: crear planificaciones de clases, automatizar algunas tareas de los profesores, generar ejercicios para que los hagan los alumnos, etc.

Además, esta es una nueva oportunidad para aprender o, más bien, enseñar a los alumnos a verificar y validar la información, a contrastar siempre y evitar utilizar fuentes no fiables.

Entradas recomendadas