De aquí a 2024, el 80% de profesores no universitarios de España deberá certificar sus competencias digitales. Así se acordó en la Conferencia Sectorial de Educación y, más adelante, lo explicó el director de INTEF, Julio Albalad durante su participación en el evento digital “Avanzando en clave digital: nuevo marco docente, buenas prácticas de centros y realidad europea”, organizado por BBVA y Fundación Fad Juventud.

Para lograr este objetivo, todas las administraciones educativas utilizarán el mismo marco de referencia, los mismos instrumentos y reconocerán mutuamente estas certificaciones. Existirán diferentes niveles, que recuerdan a la evaluación de niveles en estudio de idiomas: A1 y A2 para el estadio inicial, B1 y B2 para el intermedio y C1 y C2 para el nivel avanzado.

Esta homologación de las competencias digitales del profesorado es un paso clave en la transformación digital de la educación y permite, tal como remarcó Julio Abad, que España siga “el marco europeo”, que cuenta con iniciativas políticas como el Plan de Acción de Educación Digital 2021-2027 de la Unión Europea, entre otras medidas.

¿Por qué es importante la competencia digital de los profesores?

La tecnología y las herramientas digitales son ya indispensables en los entornos laborales, sociales, culturales y académicos, entre otros. Así pues, es evidente que las competencias digitales deben incluirse en el currículo educativo y, para hacerlo, es necesario que el cuerpo docente esté preparado para ello.

De hecho, el nuevo Marco de Referencia de Competencia Digital Docente indica que hay que abordar la tecnología desde una doble perspectiva. Por una parte, como objeto mismo de aprendizaje y, por otra, como medio o herramienta para desarrollar cualquier otro tipo de aprendizaje.

Este Marco de Referencia de Competencia Digital Docente habla en concreto de seis áreas de competencia del profesorado, que son:

  1. Compromiso profesional.
  2. Contenidos digitales.
  3. Enseñanza y aprendizaje.
  4. Evaluación y retroalimentación.
  5. Empoderamiento del alumnado.
  6. Desarrollo de la competencia digital del alumnado.

Sin embargo, debemos tener algo muy presente; algo que recuerda Patricia Villaciervos, directora en funciones y docente del Máster en TIC aplicadas a la Educación de VIU, en una entrevista para Magisterio: “La competencia digital docente no solo se debe referir a la capacidad para utilizar las tecnologías digitales para la mejora de la enseñanza y el aprendizaje, sino también para el adecuado desempeño de todas las tareas relacionadas con el ejercicio profesional”.

En definitiva, esta certificación de las competencias digitales docentes es una muestra más de algo que ya sabíamos: para lograr un cambio real en la educación, los profesionales del sector deben asumir el papel de líderes en la transformación digital.

Entradas recomendadas