Sabemos que las próximas generaciones ocuparán puestos de trabajo que no existen hoy o que, si ya se han creado, cambiarán mucho en los años venideros. De hecho, si lo traducimos en datos, se dice que hasta un 70% de los empleos que van a tener los niños de hoy todavía no se han inventado. Esto hace que nos planteemos la gran pregunta: ¿cómo educamos para las profesiones del futuro?
En primer lugar debemos tener en cuenta que los empleos del futuro requerirán aptitudes y habilidades diferentes, porque no solamente cambian las profesiones sino también la forma de trabajar (teletrabajo, coworking, nómadas digitales, etc.). Algunas de estas nuevas capacidades serán, por ejemplo, saber autogestionarse y organizarse, adaptarse rápidamente a nuevas situaciones, aprender de la propia experiencia y resolver problemas con pensamiento crítico.
De hecho, será muy importante educar poniendo el foco en estas capacidades y aptitudes, pues los conocimientos, sujetos a cambio y evolución constante, quedarán obsoletos con relativa rapidez. En definitiva, será importante que los estudiantes del futuro terminen su formación teniendo habilidades intelectuales, sociales y prácticas.
El blended learning en particular y la educación híbrida en general son metodologías de enseñanza que pueden ayudar a los estudiantes de hoy a desarrollar estas aptitudes necesarias para el mañana. Unos modelos educativos que permiten también a los centros flexibilizar su forma de enseñar para poder dar respuesta a esta transformación que ya ha empezado.
Para lograr esta adaptabilidad y flexibilidad y poder ofrecer a los alumnos y las instituciones todo lo necesario para que la experiencia de aprendizaje sea completa, es básico utilizar las nuevas tecnologías como elemento de soporte. El uso de herramientas digitales no solamente permitirá a los estudiantes conocer y explorar nuevos recursos tecnológicos, sino que les ayudará a tener un buen entendimiento del manejo de las TIC.
Debemos tener siempre presente que la educación es una de las principales claves del cambio y por eso debemos trabajar para ofrecer una enseñanza en el presente con vistas al futuro, porque solamente con esta visión de futuro podremos llegar a él preparados y sin miedos.