Presentar un tema, captar la atención de los oyentes y retenerla hasta el final nunca ha sido una tarea fácil de abordar. El desafío parece incrementarse si debemos exponer ante un público de nativos digitales habituados a contenidos dinámicos de redes sociales y a videojuegos impactantes.
Afortunadamente, el mundo digital también nos proporciona las herramientas para crear un espacio de enseñanza entretenida. ¿Nuestra favorita? Genially. Los educadores pueden diseñar materiales pedagógicos e integrarlos en el módulo LMS de Classlife fácilmente.
¿Quieres crear clases interactivas y visualmente atractivas para tus estudiantes? Aquí una serie de pasos para que empieces a crear.
1 Diseña un storyboard
Ya definido el tema a presentar en clase, el objetivo de aprendizaje y conocemos bien las características de nuestros alumnos, podemos empezar a preparar nuestra clase. Como en todo proceso exitoso, el paso clave es organizarse conceptualmente antes de producir y la manera ideal es creando storyboard.
¿Qué es un storyboard? Es una forma de planificar la estructura y el contenido de un discurso a través de un guión gráfico. Básicamente, supone bocetar a modo de viñetas cada diapositiva de nuestra presentación en vista de obtener una visión global de toda nuestra clase.
De este modo, diseñando un guión de nuestra secuencia de diapositivas, podrás crear fácilmente una estructura narrativa lógica con introducción, 2-4 secciones en el cuerpo y un cierre. Asimismo, será más sencillo decidir qué elementos del discurso deben aparecer visualmente por su grado de importancia, cuáles deben quedar a cargo del orador y quitar aquellos que se pueden omitir para adecuarnos a los límites de tiempo de nuestra clase.
2 Escoge una plantilla
Siguiendo nuestro storyboard, es momento de comenzar a crear la presentación para nuestra clase.
En plataformas como Genially existen numerosos modelos que proporcionan la base visual para el objetivo de nuestro discurso. Según el perfil de los estudiantes, selecciona los materiales pedagógicos que se adecuen a la edad y contexto de tu aula:
- Generar una presentación repleta de imágenes animadas y gamificaciones para los pequeños nativos digitales.
- Apostar por slides con calendarización de tareas o quizz interactivos para adolescentes.
- Proponer material interactivo e infografías de alta complejidad para estudiantes de ciclo superior.
3 Personaliza tu presentación
Una vez que hemos escogido nuestra plantilla base, es momento de personalizarla. Para ello debemos tener en cuenta numerosos puntos: definir una paleta de colores; escoger una correcta combinación de títulos, subtítulos y texto; adjuntar imágenes, vídeos e infografías para ilustrar el tema; diseñar diagramas comparativos y líneas de tiempo para presentar procesos; seleccionar iconos y destacados para generar puntos de atracción visual que faciliten el proceso de aprendizaje; etc.
Afortunadamente, las herramientas digitales nos facilitan este complejo proceso de producción visual. Desde el comienzo nos proporcionan opciones gráficas pre-diseñadas que facilitan la inclusión de elementos y aseguran su correcta armonía compositiva.
4 Anima tu contenido y a tus alumnos
Ya puesto en página todo el contenido, podemos dedicarnos a los últimos detalles de nuestra presentación: la magia de las transiciones y animaciones de los elementos.
También puedes crear una invitación digital con el mismo estilo gráfico de la presentación que tus alumnos encontrarán en su Campus Virtual: la expectativa a esa clase especial te asegurará un interés y mayor participación desde el comienzo de la clase.
5 Invita a colaborar a tus estudiantes
¡Momento de brillar! Con el apoyo visual, dinámico, gamificado que proporcionan presentaciones como las de Genially tu clase será un éxito.
La mejor manera de cerrar un tema es abrir el proceso de aprendizaje y ¿qué tal con una macro-presentación colaborativa? Puedes entonces diseñar una diapositiva de cierre impactante con botón de llamada a la acción, o call to action (CTA) en inglés, al mejor estilo de: “¡Suma conocimiento en equipo!” y un código QR mediante el cual los estudiantes se conviertan en editores de la presentación.
Conceptos tan demandados en el mundo laboral como la planificación, la creatividad y la oratoria pueden tener su origen en un aula interactiva. Trabajando de manera colaborativa, algunos estudiantes se sentirán mejor como productores de contenidos, otros creando gamificaciones y algunos serán imponentes exponentes.
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